MINI TERMINALES ABANDONARAN EL CENTRO DE LA CIUDAD

Las 14 miniterminales que operan en distintos sitios del casco urbano tienen los días contados para ‘hacer maletas’ y trasladarse a las terminales interprovinciales de Quitumbe y Carcelén.


Esto, porque la Reforma al Reglamento de Transporte Público Interprovincial de Pasajeros (emitida el 9 de enero de 2014) establece que, a partir del próximo 30 de junio, “las instalaciones físicas de propiedad de operadoras ubicadas fuera de las terminales terrestres, deberán ser utilizadas únicamente como oficinas administrativas”.


Luego de esa fecha, según reza en el documento, “se prohíbe la instalación de terminales terrestres privadas, así como el ingreso y salida de las unidades de transporte de pasajeros interprovincial en lugares no autorizados”.


Las empresas, después de su traslado, tendrán un plazo de 90 días para notificar a la Agencia Nacional de Tránsito (ANT) el detalle del número de instalaciones administrativas que mantendrán fuera de las terminales, esto para dar paso al proceso de legalización y registro.

Antecedentes


En 2009, el Municipio dispuso la salida de las estaciones de transferencia de pasajeros, pero solo tres de las 14 que operan dentro de la zona urbana acogieron la medida y se fueron a las terminales de Quitumbe y Carcelén.


La disposición motivó el rechazo tanto de transportistas como de usuarios. La Unión de Cooperativas Pichincha presentó un amparo constitucional y se mantuvo en el sitio.


Roberto Santamaría, gerente general de Transportes Occidental, reconoció que la salida de las terminales se la viene prorrogando desde hace muchos años atrás. “Nosotros queremos acatar esta resolución pero siempre que salgan todas la operadoras porque la Ley es para todos”, expresó.


Cristóbal Buendía, del Observatorio de la Movilidad, recordó que la Corte Constitucional ratificó la resolución del Municipio y la potestad que tiene sobre el manejo del suelo.


A su criterio, los acuerdos de orden político fueron los que impidieron dar paso a la resolución durante este tiempo. Explicó que la salida de las miniterminales se justifica debido a que con esto se mejorará la movilidad del hipercentro (desde la 24 de Mayo, en el Centro Histórico, hasta la Gaspar de Villarroel, en el centro norte de la ciudad). donde se concentra el 80% de las personas. (PSD)


La gente mira su comodidad


° Usuarios que llegan a estas miniterminales calculan que pierden entre una y dos horas en trasladarse hasta Quitumbe o Carcelén. Nancy Saltos viaja continuamente a Esmeraldas y prefiere acudir a las miniterminales porque están más cerca de su casa y porque se siente más segura.


Segundo Chicaiza, conductor de un bus interprovincial, de su parte, considera que ahorraría más tiempo si solo tiene que llegar a cualquiera de las dos grandes terminales de la ciudad.
 


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miniterminaes se calcula hay a escala nacional.

FUENTE: DIARIO LA HORA

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